Jugando aprendemos a vivir

El juego es una herramienta para cambiar el mundo

Jugar promueve el desarrollo integral de las niñas y los niños y les ayuda a conocerse a sí mismos y al mundo que los rodea.

El juego se convierte, así, en una herramienta imprescindible de desarrollo de múltiples aptitudes para la vida: respetar las reglas y los turnos, crear estrategias, iniciar y fortalecer relaciones, explorar e investigar, aceptar los propios errores y superar las frustraciones, trabajar en equipo y colaborar y cuidar de sí mismos y de las demás personas.

Es una importantísima herramienta educativa con la que fortalecer la responsabilidad individual y colectiva y con la que crecer en igualdad, venciendo los estereotipos de género que nos dividen en los juegos —y la vida en la edad adulta— según la condición femenina o masculina.

Todas las habilidades que se aprenden por medio del juego se convierten de forma inmediata en útiles y se aplican continuamente en la vida cotidiana.

Al aprender mediante el juego actividades como las tareas del hogar y los cuidados las niñas y los niños adquieren por igual un aprendizaje que van a reproducir en su vida adulta, generalizando y asentando en la sociedad la igualdad de género en esas labores.

Aprender a cuidar a las personas más vulnerables dentro del entorno familiar no es únicamente responsabilidad de mujeres, aunque, en la práctica de la vida diaria, mayoritariamente sean ellas, seamos nosotras, las encargadas de esa tarea.

Cuidar es atender, preservar, defender, asistir, administrar, cultivar, preservar, proteger, velar, curar, mimar. Todas y todos podemos y debemos hacerlo.

Cuidar a las y los demás fortalece nuestra autonomía en la toma decisiones, nuestra madurez y nuestra autoestima y desarrolla aptitudes cimentadas en valores como la solidaridad, el respeto y el amor.

En palabras de la educadora, científica, filósofa, feminista y humanista italiana María Montessori:

"El niño —y la niña— es el constructor del hombre y de la mujer, y no existe ningún hombre —o mujer— que no se formase a partir del niño —o de la niña– que fue alguna vez."

El juego es, así, una herramienta para cambiar el mundo.

Jugando aprendemos a vivir.

Última modificación: martes, 01 diciembre 2020