Hay quien sostiene que la capilla está situada en un antiguo altar perteneciente a la cultura castreña. Lo que ciertamente está acreditado es que esta ya se menciona en documentos del siglo XII como perteneciente al monasterio de Oia y que el monte sirvió de emplazamiento de piezas de artillería en las guerras con Portugal.
Toda la zona, y singularmente el monte de A Magdalena, fue objeto de estudio y en ella se encontraron restos castreños (de las culturas anchelense y camposanquiense). Así se menciona en Noticias de arqueología gallega de Pedro Díaz Álvarez (ediciones Monterrey, 1958), pág. 17 y siguientes.
Tanto el castro como la ermita están recogidos en el Inventario general del patrimonio cultural de Galicia (Xunta de Galicia).
Los alcornoques y la capilla fueron pintados por Antonio Fernández, quien en su personal interpretación del lugar alteró la situación de los árboles. Se desconoce la fecha exacta de la obra pero se encuentran referencias en el libro Pintura de Antonio Fernández, de Eliseo Alonso (edición patrocinada por el Museo Provincial de Lugo, 1957).
También fueron objeto de atención del pintor Xavier Pousa, que en 1972 los plasmó en un óleo (http://xavierpousa.org/?sec=22&idcuadro=2156&lang=eres). Por otra parte, el pueblo de As Eiras es uno de los más antiguos de toda la comarca, apareciendo ya en mapas del siglo XII con el nombre de San Bartol de Las Heras.

Los alcornoques se encuentran en la parcela 1057 del polígono 69, en As Eiras, O Rosal, en la cima del monte llamado de A Magdalena. Se sitúan casi en la cumbre y pueden observarse tanto desde abajo, desde el camino y aparcamiento, como a la altura de las copas, si se sube al recinto de la capilla. Uno de ellos, el más grande, está justo en el borde del terraplén de la parte norte de la parcela. El conjunto ocupa casi la totalidad de los laterales norte y oeste y circunda una plataforma al pie de la capilla. La parcela mencionada es propiedad en su totalidad de la Comunidade de Montes Veciñais en Man Común das Eiras y está rodeada por completo por un camino municipal asfaltado por la cara norte y parcialmente por el este del monte.

Accesos: se puede acceder desde el centro del pueblo, a partir de la iglesia por una pista asfaltada, o desde otros puntos, aprovechando la red de caminos municipales, todos asfaltados. También se puede llegar partiendo del lugar de Pontellón, desde la carretera Tui-A Guarda, en el límite entre los municipios de O Rosal y Tomiño. Como alternativa, se puede llegar también por una pista forestal en buen estado desde A Portela, en el alto de San Xoán de Tabagón, pasando por el petroglifo de O Ghorghalado. Desde el camino que rodea el conjunto hasta la plataforma donde se sitúan los árboles se puede subir por una cuesta de tierra en la que asoman raíces de los propios alcornoques.